Chile es un país de instituciones estables, de fortaleza en nuestras normas, que ofrece un escenario claro y confiable para el funcionamiento de las distintas actividades, de nuestros ciudadanos y quienes nos visitan. Somos un país donde los derechos y bienestar de sus ciudadanos está al centro, aspecto básico para la tranquilidad de una sociedad.