La diversidad de la naturaleza que nos rodea, junto al talento local y al desarrollo de infraestructura, facilitan un ecosistema único para crear futuro y abordar los desafíos de este siglo. Chile cuenta con 61 universidades, 48 centros de formación técnica, y sus condiciones lo hacen destacar en materias como astronomía, bosques y el estudio de la biodiversidad marina.
En Chile tenemos la convicción de que el fomento de la ciencia y el conocimiento es clave para alcanzar un desarrollo sostenible. Actualmente nuestro país cuenta con un gran capital humano e infraestructura de punta, con el cual generamos conocimiento y buscamos aportar desde este rincón al mundo.
Nuestras fortalezas en materia de investigación y desarrollo, sumadas a la excelencia académica, nos han convertido en un destino atractivo para la llegada de estudiantes, profesores, especialistas y científicos provenientes de diversas partes del globo.
Chile cuenta con 61 universidades, 48 centros de formación técnica y 43 institutos profesionales, y cada año alrededor de 20.000 extranjeros estudian en las universidades chilenas. Contamos también con 67 centros de excelencia, organizaciones financiadas por el Estado cuyo objetivo es formar científicos y potenciar la investigación asociada a la innovación.
Según el Academic Ranking of World Universities 2020, cuatro universidades chilenas figuran entre las mejores a nivel mundial (Universidad de Chile, Pontificia Universidad Católica de Chile, Universidad de Concepción y Universidad Andrés Bello). Además, nuestro país es el segundo de Latinoamérica que publica más artículos de investigación en revistas de excelencia.
Al talento local y al desarrollo de infraestructura, se suma la riqueza y la diversidad de la naturaleza que nos rodea, los que en su conjunto facilitan un ecosistema único para crear futuro y abordar los desafíos de este siglo. Por eso, Chile destaca en el estudio de diversidad marina, bosques y astronomía.
El norte de Chile, con más de 300 días despejados al año y escasa contaminación lumínica, posee condiciones excepcionales para la observación del cosmos y el estudio del universo. Nuestro país alberga más de 90 observatorios como el Observatorio Europeo Austral (ESO) y el Atacama Large Millimeter Array (ALMA), éste último el principal radio observatorio del planeta. Desde estos observatorios se realizan constantes hallazgos y se recolecta información que nos permite acercarnos un poco más a descubrir los misterios del universo. Así, se han logrado descubrimientos como la primera imagen de un planeta extrasolar, la primera supernova visible a simple vista en más de 400 años, la primera fotografía a un agujero negro supermasivo, la más cercana Supertierra. Al mismo tiempo, varios astrónomos chilenos han destacado a nivel internacional, como José Maza, Mario Hamuy, y María Teresa Ruiz, los tres han recibido el premio nacional de ciencias exactas, pero además, la astrónoma fue galardonada en 2017 con el premio L´Oreal- Unesco a Mujeres en ciencia.
Chile, desde el desierto de Atacama en el norte a la Antártica en el sur, cuenta con características únicas para la observación de los efectos del cambio climático en el planeta. Por eso, con el objetivo de recabar información valiosa que contribuya a tomar decisiones basadas en evidencia científica, nuestro país ha decidido levantar un Observatorio de Cambio Climático único de su tipo. El proyecto contempla la instalación de sensores en todo el territorio, los que recolectarán datos ambientales claves para abordar la emergencia climática y que quedarán disponibles de manera abierta. De esta forma, podemos decir con orgullo que una parte importante del futuro del mundo sustentable se construye desde Chile.
Por otra parte, Chile busca ponerse a la vanguardia en materia espacial, al anunciar la implementación del Sistema Nacional Satelital, proyecto que considera lanzar al espacio 10 satélites chilenos, y que además permitirá acceder a 250 dispositivos internacionales. La empresa aeroespacial SpaceX, fundada por Elon Musk, será la encargada de poner en órbita la constelación de 10 nuevos satélites a 2025.