Quedan 36 días para el pitazo inicial del Mundial de Fútbol Sub 20 Femenino que se realizará en Chile. Maestros constructores en las ciudades de Coquimbo, Temuco, Santiago y Chillán concluyen los últimos retoques de cuatro estadios refaccionados que recibirá a las jugadoras. Incluso algunas de las representantes de la selección chilena, la “rojita”, ya hicieron una inspección a las obras y pudieron pisar el gramado del estadio Germán Becker y gritar algunos “ceacheí” junto a los trabajadores.
La transformación de los clásicos recintos deportivos –Francisco Sánchez Rumoroso (Coquimbo), Municipal de La Florida, Nelson Oyarzún (Chillán) y Germán Becker (Temuco)- ha sido total. Con una inversión de casi US$ 90 millones ($ 53 mil millones), las obras son parte de una inversión en infraestructura deportiva que, según la Presidenta Michelle Bachelet, es “la más ambiciosa de los últimos 40 años”.
Cumpliendo con el estándar FIFA, la infraestructura cuenta con instalaciones que garantizan el mejor desempeño deportivo (cuatro camarines subterráneos y sala para el control de dopaje); así como la comodidad del público y los medios de comunicación. Se trata de estadios techados en un setenta por ciento, con butacas numeradas, acceso para minusválidos, marcador electrónico y dos pantallas gigantes conectadas a circuito cerrado. En ellas podrán ver las mejores chilenas y el comportamiento de los hinchas.
En Coquimbo y Temuco, los estadios cuentan con una capacidad para 18.000 espectadores en cada uno; y en La Florida y Chillán, se considera 12.000 personas por recinto.
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